- Utilizar ingredientes cien por cien naturales, sin ningún tipo de aditivo,
- Ser destilado íntegramente en cobre y,
- Estar elaborado en pequeñas partidas de menos de mil botellas.
Todo esto asegura que se cuida el proceso de principio a fin. Calidad “Premium” lo pone cualquiera en la etiqueta, pero para indicar “Craft” hay que demostrarlo.
¿Y cómo se demuestra?. Me temo que aquí es donde el consumidor debe de ser más inquieto e informarse bien. Igual que no toda la cerveza craft que se vende como craft, lo es, con los destilados pasa lo mismo. Merece la pena invertir unos minutos y visitar la página web del productor en cuestión … y rápidamente veremos que el que es craft de verdad, salta a la vista. En su página, sin duda alguna, mostrará sus alambiques al completo (no fotos sesgadas de partes inconexas), dado que son la joya más preciada en cualquier destilería craft. Además, enfazitará en el hecho de producir en pequeñas partidas, que es realmente el fruto del uso de dichos alambiques. Nunca sabremos si realmente utiliza ingredientes naturales, pero normalmente, el que cumple los requisitos anteriores y ha hecho las inversiones necesarias para producir de esta manera, se asegurará de asegurar la máxima calidad y sin duda utilizará ingredientes naturales a tal fin.
Ya sabes, la próxima vez que te hablen de un destilado craft, comprueba por ti mismo que es así. Los destilados craft son genuinos, originales y sin duda de más calidad, lo cual necesariamente conlleva un precio más elevado. Si es realmente craft, merecerá la pena, es un primer paso para beber mejor.